Una pequeña introducción
Una vez que hemos visto el curso sobre gastos y el de ingresos, es hora de dedicarnos al margen, al beneficio. Sería un error pensar que lo que queda entre los ingresos y los gastos es nuestro sueldo, ya que eso deberíamos incorporarlo en los gastos de nuestra empresa. Tanto esfuerzo debe tener una recompensa, y quedarnos únicamente con el margen, puede ser fatal, ya que unos meses hay y otros no.
Es verdad que las grandes empresas y los socios capitalistas lo hacen así, pero ellos no trabajan como uno más de la empresa y nosotras sí. Así que ya sabes, tu sueldo debe ser un gasto más.
Pero entonces, ¿qué hacemos con los beneficios? Bueno, pues como vemos en este vídeo de introducción, los vamos a repartir en tres pilares:
[restrict]
[/restrict]
Las reservas
Vamos ahora con una de las ramas en la estabilidad de nuestro negocio: necesitamos establecer reservas. Y sin entrar en tecnicismos, sería como hacer una hucha o colchón por si acaso. Lo vemos en el vídeo.
[restrict]
[/restrict]
Las provisiones
La segunda pata de la estabilidad de nuestro negocio serían las provisiones. En el momento en que contraemos una obligación de pago, o dicho en cristiano, en el momento en el que tenemos que pagar algo sí o sí, deberíamos abrir una «hucha» donde vayamos guardando las cantidades a pagar. Vamos a ver por qué es importante hacer ésto:
[restrict]
[/restrict]
El crecimiento
Está claro que crecer no es una obligación, ni debe ser el paso siguiente a la creación del negocio. Antes tenemos que estabilizarlo, pero no deja de ser importante. Has dedicado tanto esfuerzo en crear tu empresa, que dejarlo a la deriva o mantenerlo en el mismo sitio durante años sería un error. Te cuento por qué y cómo deberías hacerlo crecer y por qué tienes que tener esta mentalidad desde el momento en que lo creas.
[restrict]
[/restrict]